Gracias. ¿Qué por qué? Pues por todo aunque haya sido poco. Por cosas que aunque sé que no te has dado cuenta, me han servido de mucho. Por ese día en el que venía melancólica por la calle y tu sin conocerme de nada me saludaste y sonreiste. Gracias por seguir haciéndolo. Ya que tu eres la razón por la que vuelvo a sentirme ilusionada, la razón por la que vuelvo a sonreír, la razón por lo que veo el mundo de color, la razón por la que me pongo mi camiseta favorita y mi pulsera de la suerte ese día en el que se que te voy a ver. Sé que tu no sabes todo el efecto que causas en mí y todo lo que me estás ayudando, pero espero que algún día lo descubras. Mientras tanto: gracias.

Te confesé mis sentimientos, como la valiente que era, como la valiente que soy.
Iba preparada para ese temido no. Que no me quisieses.
Pero no he podido ser tan fuerte como imaginaba, sigo pensando en ti, teniendo
en mis contraseñas tu nombre y el mío el juntos; como me gustaría que estuviesemos
ahora. Pero nada a salido como imaginaba, ya ni si quieres me saludas.
Hecho de menos tus palabras, tus ganas de picarme, de que nos ríamos juntos.
Antes aunque estuviese a 50 metros tuyos, me saludabas efusivo sonriendo.
Ahora has cambiado, todo a cambiado. Y echo de menos los momentos de antes, aunque
fuesen como amigos.

Si quieres tener unos labios atrayentes, pronuncia palabras afectuosas.
Para tener unos ojos cariñosos busca el lado ueno de las personas.
Para estar delgada, comparte tu comida con el hambriento.
Para tener un pelo precioso, deja que un niño lo acaricie con sus dedos.
Recuerda, si alguna vez necesitas una mano la tendras al final de tus brazos
Cuando envejezcas te darás cuenta de que tienes dos, una para ayudarte
a ti misma y otra para ayudar a los demás.
La belleza de una mujer aumenta con el paso del tiempo. La belleza de
una mujer no radica en la estética, sino en el reflejo de su alma...

Eres un estúpido, un gran estúpido.
O quizá incluso la estúpida soy yo
por seguir enamorada de ti.
Te dije que te quería y casi que te
ríes de mi. Se lo cuentas a todo el
mundo, creyendote el rey de algo.
Creyendote importante.
Y no es asi, ya que los que crees
que son tus "amigos" te critican
a la espalda, pero por que sean
unos falsos y te sonrían no signi_
fica que les caigas bien.
Pero tu me rechazas, me tratas
como si no fuese nada; pero en
tu vida aunque tú no lo sepas he
 sido todo lo contrario.
He sido la única que te he visto
con buenos ojos, la única que
sabe que eres muy grande.
Pero eres tan estúpido que todavía
no te has dado cuenta.

Si bebo, soy una borracha.
Si no bebo, soy una autentica aburrida.
Si fumo, soy imbécil.
Si no fumo, " no me enrollo"
Si estudio, soy una  empollona.
Si no estudio, soy gilipollas.
.Si contesto bien, me dan de palos.
Si contesto mal, dicen que soy demasiado borde.
Si escribo bien, soy una "doña perfecta"
Si escribo mal, soy una "choni"
Si me gusta Jonas, soy infantil.
Si me gusta heavy, soy rara.

Si visto bien, soy presumida

Si visto mal, soy una descuidada

Si me gusta el fútbol, parezco un tío

Si no me gusta, soy pija

Si gasto bromas, soy una payasa

Si no las gasto, soy una sosa

 

¡No se puede ser perfecto!

 

 

Me prometí no volver a sufrir por amor, que mi felicidad no tuviese que depender de nadie, que una mitad de mi corazón no volviese a ser adicta a alguien.
Pero las promesas no son para siempre; ya que aqui estoy yo llorando, abrazada a una foto tuya, pensando en tu sonrisa e intentando recordar motivos por lo que ser feliz; aunque no encuentre ninguno.

Llorar no es malo, siempre que sea de felicidad